Todos los periodistas, analistas y sevillistas coinciden en que el encuentro del Sevilla FC ayer en Vigo, fue lamentable. Debilidad defensiva, constantes ocasiones del rival, poco peligro arriba, no conseguimos saber a lo que quiere jugar Diego Alonso, rendimientos bajos y falta de compromiso de algunos jugadores. Un desastre.
Todo esto hace que Diego Alonso empiece a estar cuestionado a pocas semanas de haber llegado a la capital hispalense. Una derrota abultada en Londres y otra en el derbi, podrían adelantar su salida del club de Nervión, teniendo en cuenta que hay otro parón.
Los dirigentes del Sevilla FC se dejan influenciar por el famoso «entorno» y ya hay voces que piden la destitución de Diego Alonso. Fue una apuesta de Víctor Orta, y ni Pepe Castro ni Del Nido Carrasco, conocían su trabajo, fueron a por Marcelino.
Ahora mismo el Sevilla FC optaría por un perfil de entrenador diferente, por alguien que conozca la casa y a los pesos pesados del vestuario. Las dos opciones que se manejan son Joaquín Caparrós o Manolo Jiménez.