El club rojiblanco vive en una constante tensión, disfrutando poco de los buenos momentos y sufriendo la mayoría del tiempo por los problemas de su equipo.
El disfrute por la Europa League apenas duró unos días, ya que después, Monchi quería irse, a continuación llegó la renovación de Mendilibar, el nuevo director deportivo…
Es cierto que siempre la afición del equipo de Nervión, ha pecado de exceso de exigencia, y aveces ejercer una crítica feroz sobre su club, excediéndose, pero en este momento se critica con razón.
Aunque muchos coinciden en que el entrenador ya no es culpable de esta situación, la realidad es que el equipo da peores señales que con Mendilibar. Con el vasco el equipo competía y el otro día en Vigo daba sensación de haberse caído por completo.
Al ser un entrenador sin experiencia en Europa y siendo el Sevilla una gran oportunidad para él, el salario y la indemnización por despido, son bastante bajos comparados, por ejemplo, con Lopetegui y Sampaoli. Destituir al uruguayo le costaría al club una cantidad entre los 300.000 y los 400.000 euros, algo asumible.