No se caracteriza precisamente el Sevilla de las últimas épocas en ser un club que sus dirigentes tomen decisiones claras y concisas. Más bien todo lo contrario, se están caracterizando y acostumbrando a dar una serie de bandazos, que encima son telegrafiados a la prensa.
Aunque Víctor Orta dijera que Xavi García Pimienta era la primera opción para el banquillo, es evidente que eso no es cierto, ya que está completamente confirmado por los propios protagonistas, que se han tanteado muchas más opciones, incluso se han negociado y mandado ofertas.
Si Maurizio Sarri hubiera respondido positivamente a la oferta del Sevilla, el italiano era el que hubiera sido presentado la semana pasada en la sala de prensa del Ramón Sánchez Pizjuán.
El Sevilla Fútbol Club le había ofrecido unas condiciones que no estaba dispuesto a aceptar, tenía un presupuesto limitado y el italiano tenía como exigencia venir con su equipo, que lo formaban unas ocho personas. Sus pretensiones económicas no podían ser cumplidas por el club.