Los chicos de Manuel Pellegrini fueron derrotados ayer frente al Spartak de Praga, suponiendo una decepción para los aficionados desplazados a la capital de la República Checa, aunque pasaron unos días fantásticos en una de las ciudades más bonitas de Europa.
Nada tuvo que ver el rendimiento del equipo con el de los últimos encuentros, y es que a día de hoy, existe mucha diferencia entre la unidas A y la B, y Pellegrini es consciente de ello.
El equipo no fue dominador del encuentro, el ímpetu y el físico de los checos, se impuso a la calidad de los béticos. Lo positivo es que el Betis sigue siendo primero de grupo tras no ser capaz el Rangers de ganar al Aris Limassol, si ganan o empatan ante los escoceses en el Benito Villamarín, serán primeros de grupo.
Pellegrini está descontento con la actuación de varios futbolistas ayer. Los laterales dieron un muy mal rendimiento, sobrepasados por jugadores de mucho menos nivel, hablamos de Abner y de Aitor Ruibal. El entrenador quiere refuerzos en esas zonas para competir por algo importante.
Borja Iglesias, aunque mejoró en ciertas cosas, no se pone de gol, y el entrenador quiere un delantero que compita con Willian José.
A Manuel Pellegrini le gustaría que salieran varios futbolistas y traer otros que puedan dar mayor rendimiento, es la exigencia del Ingeniero, no se cansa de ganar y cualquier derrota supone un drama para él.
Le gustaría poder ceder a Abner, y con la más que clara salida de Miranda, traer dos laterales de nivel, uno de ellos Javi Galán. Además de un delantero que esté ahí, que marque y que genere juego, Borja no está.
Ruibal tampoco está dando la talla en los minutos que tiene, y teniendo en cuenta que Sabaly lleva una racha muy mala de lesiones, le gustaría contar con otro lateral que pueda ayudar a Héctor Bellerín, titular indiscutible.