Quincy Promes puede ser uno de los jugadores profesionales más polémicos de la historia del fútbol y extraño fue que en su paso por el Sevilla FC, lo más raro que hizo fue regalar un iPhone a un aficionado.
Estuvo una sola temporada en Nervión, costando 21 millones de euros y vendido por 18 después de una temporada decepcionante en la que solo marcó dos goles, se esperaba mucho de él.
Después de irse del Sevilla, el jugador solo ha tenido líos y más líos. Primero apuñaló a su primo, después fue procesado por el importar 1200 kilos de cocaína, y ahora está liándola en Rusia.
Ha sido grabado en una comisaría de Moscú muy alterado, intentando sobornar a la policía rusa para que dejaran en libertades a varios amigos suyos que estaban detenidos por asuntos de droga. Estuvieron apunto de detenerlo porque estaba muy alterado.
Quincy Promes probeert Russische politie om te kopen ?? Artikel: https://t.co/g3ED8MpCo4 pic.twitter.com/93eVDRDp10
— Voetbalzone.nl (@voetbalzonenl) September 25, 2023