El Sevilla estaba acelerando en las últimas horas por firmar a Alexander Djiku, central del Strasburgo que seguía la dirección deportiva desde hace algunos mercados. El ghanés termina contrato en junio de este año y era una oportunidad para cerrar a un buen jugador a priori por un precio bajo.
Monchi empezó ofreciendo un millón de euros y después subió la oferta rondando los dos millones, pero el club francés considera a este jugador clave en su proyecto, y pide unos 7-8 millones por el central.
Quedándole 5 meses de contrato, el Sevilla no va a pagar esa cantidad, por lo que ya baraja otras opciones.
Gusta en la dirección deportiva la opción de Malang Sarr, tiene 23 años y acaba de romper su cesión del Chelsea al Mónaco, siendo un central zurdo que puede jugar también de lateral, lo que pide Sampaoli. Una cesión, operación muy parecida a la de Loïc Badé. Evidentemente es bajar un escalón respecto a Djiku, pero es lo que hay…